miércoles, 21 de octubre de 2009

Tentación


Juego porque no debo,
y me fuerzo a cerrar los ojos
ante la tentación del fruto prohibido,
pero la vida corriendo en mis venas
se rebela y amotina
obligándome a considerar
cuáles son mis opciones.
Y no hay muchas en realidad...
Juego al gato y al ratón
sin estar exactamente
segura de mi rol...
Y es que la tentación.
La maldita tentación...
La que acallo con mi risa,
la que oculto en mi voz,
la que niego y reniego,
porque sé que es un error.
Y sin embargo, juego con fuego
y me arriesgo
a más de algún chamuzcón.
En mala hora apareciste,
y en mala hora te dejé
ocupar ese rincón de mi pensar,
porque ahora tendré que ver
cómo hago para erradicar
la tentación,
la bendita tentación...

domingo, 4 de octubre de 2009

En tu tumba


Me tiendo en tu tumba a disfrutar,
mas no pienso en ti
excepto en ese fugaz momento
en que con sorpresa
me doy cuenta de que has muerto,
y sigo en mis asuntos
como si no importara,
y en efecto, no me importa.
Ya no...
Y no importa lo que haga, ni con quien,
pues bien sé que de eso, no se trata.
Yo disfruto en tu tumba o en otro lado,
porque los momentos fugaces que nos [ unieron
ya no están y ya no importan
más que por lo que son y lo que fueron.
Descansa en paz, que yo lo estoy.
Descansa en paz, que en tu tumba me divierto.
Descansa en paz, que ya no importa.
Ya no...